Jamás podría amar a mi gato como a un humano, pues ella demostró tanta lealtad como ninguna persona, jamás podría amarla como a un hijo, pues a ese nunca he deseado parir, ni criar.
Fue lindo haber compartido una vida con dicha, lealtad y amor, y por eso debo mi respeto a ese ser que vivió por un corto tiempo, menos del que hubiera querido, pero del que estoy sumamente agradecida por haber llegado a mi vida
Te quiero, te extraño.. ¡gracias x tanto!
No hay comentarios:
Publicar un comentario